Un grupo de profesores universitarios publica un libro polémico que desvela la encrucijada en la que se mueve Internet, entre un nuevo espacio público libre y el riesgo de los controles del Gran Hermano. « Más información no significa más democracia », aseguran los autores de Vigilados.
Una reciente viñeta del dibujante El Roto exclamaba : « El próximo diluvio será de datos. » Esta imagen les sirve a Susana Díaz y a Jorge Lozano, los dos profesores que han coordinado Vigilados. Wikileaks o las nuevas fronteras de la información (Biblioteca Nueva), para ilustrar el enfoque de su libro, un ensayo heterodoxo y que nada a contracorriente de ese pensamiento único que sólo glosa las grandes virtudes de la sobresaturación de información en la era digital. Algunos intelectuales calificaron la irrupción de los cables de Wikileaks, en el año 2010, como « paraíso para los historiadores » o « una nueva era del periodismo ». Apenas cuatro años después de aquella lluvia de correos diplomáticos, políticos y económicos, que eran secretos, el tiempo ha venido a demostrar que una sobresaturación de información no genera ni más cultura democrática ni unos ciudadanos más libres y críticos. Así lo sostienen Díaz y Lozanoy una docena de expertos internacionales en teoría de la información que escriben en el libro.