Estados Unidos celebraba este martes sus comicios « de mitad de mandato » para renovar la Cámara de los Representantes y un tercio del Senado. Todo apunta a que la victoria será para los republicanos, tras una campaña mediocre que ha costado casi 4.000 millones de dólares. El triunfo de la derecha puede traducirse en la parálisis del presidente Barack Obama y del Congreso.
Nueva York, de nuestra corresponsal.- Atacar a su oponente en lugar de presentar un programa político, no temer a la vulgaridad, apostar por el miedo, por el escándalo y gastar sumas colosales. Esta sería, exagerando un poco, la receta favorita de los candidatos norteamericanos en las llamadas elecciones demitad de mandato que se han celebrado este martes 4 de noviembre en Estados Unidos. La elección de los 435 representantes de la Cámara y de 36 senadores (algo más de un tercio del Senado) alumbrará un nuevo Congreso.