Pese a los riesgos, Japón quiere volver a poner en marcha sus centrales nucleares

Por FRÉDÉRIC OJARDIAS

Todas las centrales nucleares de Japón permanecen cerradas desde septiembre de 2013. Pese al recelo de la población, el gobierno de Shinzo Abe intenta revivir sus reactores. El país, que depende de las importaciones de energía fósil de Oriente Medio, ha duplicado la producción de energía solar en tan solo dos años.

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El 22 de febrero de 2015, se detectó una nueva fuga altamente radiactiva en la dañada central nuclear de Fukushima. Agua, con unos niveles de radiactividad 70 veces superior a los que se registran en el complejo, que vierte al mar. Un fallo más en este auténtico campo de ruinas, escenario de una pesadilla que no tiene fin: 6.000 obreros se ven sometidos a importantes radiaciones a diario, un desmantelamiento peligroso que va a durar 40 años y, según Greenpeace Japón, 120.000 « refugiados nucleares » que siguen sin poder regresar a sus casas.

El operador Tepco (Tokyo Electric Power Company) emplea a diario 300 toneladas de agua para enfriar lo que queda del núcleo y de las barras de combustible fundidas de los tres reactores. 370.000 toneladas de estas aguas altamente contaminadas se depositan en más de mil cisternas gigantescas, cuya fiabilidad preocupa a la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA). Todos los meses, se construyen decenas de depósitos nuevos. Las estimaciones del coste total de la catástrofe ocurrida el 11 de marzo de 2011 varían. En 2011, el Gobierno calculó que ascendería a 257.000 millones de dólares.

Sin embargo, este escenario apocalíptico no disuade al Gobierno del conservador Shinzo Abe de sus intenciones de volver a retomar este año la carrera nuclear. Desde septiembre de 2013, Japón es de facto un país no nuclear; sus 48 reactores operativos están parados. Pero, en 2014, las autoridades reguladoras de la seguridad nuclear dieron luz verde a la reactivación de cuatro reactores: dos en la central de Sendai (en la isla de Kyushu, en las inmediaciones de un volcán activo) y dos reactores en la central de Takahama, en la prefectura de Fukui.