De fondo se encontraba la conocida como primavera árabe y una de las mayores crisis económicas y financieras de todos los tiempos gestionada por una clase política que se desacreditaba día a día. La indignación crecía y se contagiaba a través de Internet y las redes sociales. Y un día la chispa prendió. Era el 15 de mayo de 2011 y comenzaba un movimiento que, desde el primer momento, parecía que haría historia.
Está suscrito?
Iniciar la sesión
No está registrado?
Registrarse
Elija una oferta de suscripción para leer todo Mediapart.
Registrarse