En el juicio de extradición de Julian Assange, iniciado esta semana en Londres, el periodismo es el acusado. El fundador de WikiLeaks no es un espía, sino un activista que defiende un derecho fundamental: el derecho a saber todo lo que es de interés público. Por eso apoyamos su causa.
Después de tres días dramáticos, el presidente del Partido Demócrata exigió una revisión parcial de los resultados de Iowa. Como Pete Buttigieg, Bernie Sanders reclama la victoria.
Charlottesville, Pittsburgh, El Paso, etc. Los asesinatos y ataques cometidos por los supremacistas blancos son ahora la principal amenaza para la seguridad en Estados Unidos, según el FBI. Una confesión tardía. Después del 11-S, la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) se negó durante mucho tiempo a autentificar la amenaza.
Mediapart ha podido consultar los documentos que detallan la vigilancia de la Embajada de Ecuador en Londres, donde se encontraba refugiado el fundador de WikiLeaks. Se trata de un dispositivo de vigilancia digno de una película de espías. La justicia española acaba de acordar el estatus de « testigos protegidos » a tres exempleados de UC Global, la empresa de seguridad encargada del espionaje.
Al ordenar la eliminación del general iraní Soleimani por medio de un dron en Bagdad, Trump se comportó como cualquier otro déspota de la región. Convirtió a Estados Unidos en un país como cualquier otro de Oriente Medio... Exponiendo a los aliados locales de Washington al riesgo de represalias de Teherán.
Ejecutado por orden de Donald Trump, el asesinato del general Qassem Soleimani, líder militar iraní de alto rango, es un paso más hacia el abismo guerrero. Si el futuro nunca está escrito, ¿cómo ignorar que el poderío estadounidense está poniendo en peligro al mundo con su comportamiento de Estado delincuente, pisoteando el derecho internacional? Francia se sentiría honrada de decirlo alto y claro.
Las audiencias públicas celebradas en el Congreso de Estados Unidos han permitido demostrar la corrupción de la Administración Trump. A este drama televisivo se suma otro, esta vez político: si el presidente y sus acólitos pisotean los hechos, valiéndose de ficciones paralelas, ¿para qué sirven los contrapoderes?
Durante su reclusión en la Embajada de Ecuador en Londres, cada movimiento y conversación de Julian Assange fueron grabadas por las cámaras de una empresa española encargada oficialmente de la seguridad del recinto, pero, bajo cuerda, controlada por la CIA. Las visitas del fundador de Wikileaks también fueron vigiladas, entre ellas el abogado francés Juan Branco, que presentará una denuncia contra X.
La eliminación del fundador del difunto « califato » islámico no pesará mucho en el desastroso balance del presidente estadounidense en Oriente Medio, donde ha acumulado estrategias erróneas y sonados fracasos.
Casi lo hemos olvidado. Cuarenta personas languidecen en las celdas de Guantánamo. Tres cuartas partes de ellas ni siquiera son acusadas formalmente por la justicia. La monstruosidad jurídica construida por el nuevo poder estadounidense prohíbe el cierre del campo de detención, impide toda liberación y viola los derechos humanos. Pues, ante todo, se trata de proteger a Estados Unidos de las acusaciones de tortura. Explicaciones.
Con una mezcla de oportunismo y visión estratégica, el presidente ruso ha conseguido volver a poner a su país en el centro del juego geopolítico internacional, gracias a su implicación en Siria y a los errores de Estados Unidos.
El exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani, se encuentra en el epicentro del escándalo ucraniano que le ha valido a Donald Trump la apertura de un proceso de destitución. Su diplomacia paralela, sus vínculos con empresarios americano-ucranianos, sus asuntos turbios y sus continuas mentiras, podrían pasar factura al presidente estadounidense.
En esta entrevista concedida a Mediapart, Joseph Stiglitz, que publica una nueva obra en Francia, explica por qué el presidente estadounidense es un síntoma de la crisis del neoliberalismo, pero también constituye una amenaza para los valores de Estados Unidos.
California quiere que los conductores de Uber se conviertan en asalariados; 50 Estados han lanzado una investigación contra Google; Facebook está desbordado por las causas abiertas en su contra: los tiempos han cambiado y parece que Estados Unidos apuesta por establecer una verdadera regulación en estos sectores.
Pese al anuncio de Donald Trump sobre la inmediata suspensión de las conversaciones con los talibanes para alcanzar un acuerdo de paz, las negociaciones continúan entre estos enemigos históricos.