Una semana después del estallido de la cotización de una empresa de videojuegos, que puso de rodillas a los « hedge fund », el mundo financiero sigue tratando de interpretar el suceso. ¿Venganza de los pequeños contra la élite? ¿Un saqueo de Wall Street comparable al del Capitolio? ¿O señales de advertencia de que los mercados financieros se están quedando sin aliento?
La epidemia del coronavirus está provocando un cortocircuito en la economía mundial. El petróleo, los mercados financieros, todo se hunde. « Nos enfrentamos al momento más crítico desde la crisis financiera », advierte un estratega.
A pesar de un fuerte repunte registrado el 26 de diciembre, los mercados financieros se han desajustado en el último mes del año. Preocupados por las perspectivas de la economía de Estados Unidos, los inversores también están alarmados por el rol de « bombero pirómano » encarnado por la administración Trump. El precio de una nueva crisis financiera sería considerable para la economía mundial, que apenas tiene mecanismos de defensa.
El mundo financiero especula desde hace diez años con el VIX, conocido como el "índice del miedo", encargado de evaluar la volatilidad y detectar futuras crisis. Sin embargo, a día de hoy, se le considera responsable del hundimiento de Wall Street que tuvo lugar el pasado 5 de febrero.
Tras tres años de ausencia en los mercados y siete años de crisis, Grecia se dispone a financiar su deuda. Pero este regreso a los mercados no es el epílogo de una crisis interminable. Se trata de un nuevo punto muerto que pone de manifiesto la necesidad de reducir el volumen de la deuda.
La incertidumbre, fruto del Brexit, ha vuelto ha provocar fuertes turbulencias en los mercados financieros. La libra y las inversiones caen en picado. Y lo que es más inquietante: el riesgo de contagio avanza en Europa. Sobre los bancos italianos se cierne la especulación. La crisis de la zona euro podría repetirse.
La caída en las Bolsas, los mínimos del precio del petróleo y la situación económica en China alimentan las previsiones económicas más pesimistas para este año. Diferentes analistas coinciden en pronosticar una nueva crisis financiera similar a la de 2008.
La titulización, la técnica financiera que convierte la deuda en un activo financiero y que agravó la crisis de 2008 en EEUU, reaparece en Bruselas. La Comisión Europea promete que la titulización será « limpia », sin embargo eurodiputados y ONG se oponen a implatar esta técnica.