Escribámoslo pronto y claro: a Mariano Rajoy lo echan los votos. Es falso que sea víctima de una especie de conspiración encabezada por Pedro Sánchez, a su vez inspirado por Pablo Iglesias, un complot en connivencia con los independentistas para hacerse con el poder poniendo en riesgo la unidad de España. La estrategia de la mentira tiene un límite.
Desde octubre de 2015, los socialistas controlan las riendas del Gobierno portugués, gracias al apoyo de una original coalición en el Parlamento: la izquierda radical del Bloco y el Partido Comunista. Una alianza que podría enseñar más de una lección a otros países europeos. Entre los logros del Gobierno luso destacan la bajada de impuestos a las rentas más bajas, la subida de las pensiones mínimas, la gratuidad de los libros escolares hasta el sexto año o un nuevo impuesto a los beneficios de las grandes empresas. Reportaje.
Proteger el secreto de la identidad de sus fuentes ha sido la única condición que se han impuesto los periodistas Edwy Plenel y Fabrice Arfi al comparecer en la mañana ante la comisión del Parlamento francés que comienza a investigar el affaire Cahuzac. Se trata el escándalo de la cuenta no declarada en Suiza del ya ex ministro socialista de Presupuesto Jérôme Cahuzac. Por Javier Valenzuela de infoLibre