Tel-Aviv, Israel.- Todo comenzó en Eilat, « Las Vegas » israelí del extremo sur del país, con sus discotecas, sus barcos-casino y sus temperaturas asfixiantes. A causa del coronavirus, los israelís han pasado el verano en las estaciones balnearias del país. Como mucha gente, una muchacha de 16 años decide alquilar una casa con sus amigas. Una tarde, el grupo de amigas se une a otro grupo en el bar del hotel Mer Rouge. En estado de embriaguez, la presunta víctima sube entonces a la habitación a echarse en la cama y allí habría sido violada por unos treinta hombres, que habrían hecho turno en la puerta. El suceso se remonta al 12 de agosto, pero el escándalo explotó una semana después, cuando los medios informaron en portada.
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