El auge de los populismos es el resultado de nuestros fracasos económicos. El trabajo se encuentra cada vez más excluido del reparto de las riquezas generadas, en beneficio del capital. Nunca antes las desigualdades han sido tan grandes. Un colapso histórico desde el advenimiento de la era industrial.
A veces hay gráficas que dicen más que miles de análisis, por buenos y fundamentados que sean. A principios de abril, el Fondo Monetario Internacional publicó en su blog la evolución de la parte de la renta nacional que recibieron los asalariados desde 1970. La gráfica por sí misma resume el origen del malestar de los individuos y de la sociedad, que sacude a todas las economías avanzadas, incluso a todas las economías mundiales. Se trata de un momento crítico. Un colapso histórico que difícilmente se puede comparar a ningún otro de la era industrial. En 45 años, la parte correspondiente a los ingresos del trabajo bajaron más de 5 puntos, hasta representar casi el 50% en las economías avanzadas. En estos momentos, en los países en vía de desarrollo es de poco más del 36%.
