Tras un proceso expeditivo, nueve habitantes del pueblo de Wukan acaban de ser condenados a penas de prisión firme. En 2012, las reivindicaciones de los lugareños para recuperar sus tierras fueron escuchadas por las autoridades y llamaron la atención de los medios de comunicación internacionales. A día de hoy, esto no es más que un lejano recuerdo.
El 26 de diciembre de 2016, nueve habitantes del pueblo de Wukan, en la provincia china de Cantón, eran condenados a penas de entre dos y diez años de cárcel tras un juicio de menos de media hora. La victoria de 2012, cuando los lugareños obtuvieron el derecho de nombrar libremente a su comité local, encargado de redistribuir las tierras expropiadas por un promotor inmobiliario, no es más que un recuerdo. Estas condenas ponen fin a un año negro para el pueblo, dado que Lin Zulian, secretario de la célula del partido de la localidad y exlíder de las manifestaciones de 2012, fue condenado a tres años de prisión el pasado mes de septiembre tras confesar en la televisión. Trece vecinos permanecen detenidos a la espera de juicio, mientras la policía armada popular continúa patrullando día y noche las calles de Wukan.